Por Ivonne Ferreras.
Santo Domingo.
El presidente Danilo Medina, autorizó, grado a grado, mediante Poder Especial
otorgado al Vicepresidente Ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas
Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Jiménez Bichara, la instalación de una
nueva planta generadora de electricidad a carbón, esta vez en la localidad de
Paya, Baní, de 600 megavatios, adicionales a las que se construyen en Punta
Catalina, en la misma provincia.
El Poder
Especial No. 39-14, de fecha 28 de marzo de 2014, calzado con la firma del
presidente Danilo Medina y tramitado vía Consultoría Jurídica del Poder
Ejecutivo, ratifica un primer acuerdo
registrado con el numero 391/13, suscrito
a nombre y en representación del Estado dominicano entre la CDEEE y la
empresa Pinegy Comercial Group, SRL, representada por Porfirio Velázquez
Arredondo, el 27 de diciembre de 2013,
justo después del proceso de licitación para la construcción de las plantas,
también a carbón, de Punta Catalina.
Según el documento,
que forma parte del dossier en el que se detalla el denominado “Acuerdo de
Potencia’ entre las partes, éste tendría una duración de 25 años, “plazo que se
computará desde la instalación y la puesta en operación de la central, lo que
deberá suceder en un periodo máximo de 24 meses calendario consecutivos, a
contar desde el momento en que sean obtenidos todos los permisos y las
autorizaciones que se requieran”.
En el poder
otorgado al ejecutivo de CDEEE, el Presidente Medina destaca que las partes
establecen las condiciones bajo las cuales Pinegy Commercial Group, SRL, se
compromete a instalar y mantener a su solo costo, “una central, constituida por
una planta de 600MW de capacidad nominal, una turbina a vapor de 600MW netos de
disponibilidad; con una unidad de recalentamiento simple con dos turbinas de
doble flujo, tànden-compuesta, con condiciones de estrangulación a 3, 500psig
1050 F/1100 F, un generador de vapor fabricado por Alston, con una capacidad de
aproximadamente 4,650,000 libras por hora, capaz de quemar carbón pulverizado
desde 11,000 a 12,000 btu por libra, o una combinación de carbón y coque de
petróleo (hasta una mezcla del 70% al 30%), con todos los equipos auxiliares;
la subestación eléctrica; el transformador principal de salida; los equipos de
medición y capacidad de generación independiente para arranque en frío; la
instalación de una correa secundaria transportadora de carbón y un parque de
carbón”.
Sin embargo,
y a pesar de los detalles que ofrece el Presidente Medina en el poder otorgado
a Bichara para una negociación que, aun las motivaciones procura resolver un
problema al país, se ha manejado de
manera oculta, técnicos consultados aseguran que “de ninguna manera podría
tratarse de una sola planta de 600 Mw”, pues, el sistema no lo aguantaría,
desde el punto de vista de la estabilidad de la red y, por tanto, debería ser
por lo menos dos unidades de 300 Mw.
Igualmente,
conforme lo estipulado en el documento, “Pinegy Commercial Group se compromete
a vender a la CDEEE o a terceros, la cantidad de energía convenida durante la
vigencia del acuerdo, así como a financiar y a construir el Puerto Carbonero,
con la correa principal transportadora de carbón, la torre de transferencia y
las líneas de transmisión”.
De su lado,
“la CDEEE se compromete a comprar a Pinegy Commercial Group, la cantidad de
energía acordada, y a reembolsar las inversiones correspondientes al Puerto
Carbonero, con la correa principal transportadora de carbón, la torre de
transferencia y las líneas de transmisión, en caso de que la CDEEE confirme,
mediante acuerdo por separado, la asignación de las obras a Pinegy Commercial
Group”.
A juzgar por
este nuevo contrato y/o acuerdo grado a grado para la instalación de otra
planta de600 MW a carbón, y al margen del pacto eléctrico, en el que diferentes
sectores discuten el futuro eléctrico del país, se concentraría en una sola
demarcación geográfica, alrededor de mil 300 MW de potencia eléctrica, lo que,
a juicio de técnicos especializados en la materia, esto sería una especie de
bomba de tiempo en términos medioambientales.
Habrá que
ver si el mencionado acuerdo, avalado por el Presidente Medina, para la
instalación de esta planta generadora “de 600 MW habrá iniciado sus
operaciones.
Quién es
Pinegy Comercial Group, SRL, y de dónde saldrá el financiamiento de la obra.
Según lo
publicado en el sitio WEB especializado en el tema, el financiamiento para la
planta estará sustentado por la empresa Virtute Fortuna Energy Fund, quien
junto con Pinegy Commercial Group, SRL, se han asociado para la estructura de
un financiamiento “sustentado por una carta giratoria de crédito irrevocable,
emitida por el gobierno de la República Dominicana, para solidificar la venta
de la generación de energía a la CDEEE por PINERGY después finalización exitosa
y operación de la planta de energía de nueva construcción”.
Explica: “La
ejecución de un acuerdo de compra de energía ("PPA") cae dentro de
los propósitos previstos de promover el desarrollo industrial de la generación
de energía eléctrica para la República Dominicana, con el fin de ampliar su
suministro de energía para el país, con planes futuros de generar condiciones
que permitan para la cantidad suficiente de energía, la calidad suficiente de
energía, y la distribución de energía a un precio reducido por kilovatio-hora.
El PPA validará la venta de la energía generada por la central eléctrica de
propiedad y operado por PINEGY a la CDEEE. La PPA es un acuerdo bilateral para
proteger ambas partes, garantizado por una carta de crédito irrevocable
giratoria, de cualquier interrupción que han surgido potencialmente”. (Ver
enlace). http://www.energy.vffunds.com/pp_agreements.html.
Según lo
dicho, se trata de un fondo de inversiones en las islas de Gran Cayman, quienes
tienen un PPA con la CDEEE, (IPP), algo, en apariencia similar a los
contratos con la empresa Cogentrix y Smith and Enron. Peor aún, todo parece
indicar que es el mismo contrato, --muy cuestionado por cierto--, de Sichuan. Esto así, por lo de la garantía con
carta de crédito re-envolvente según la publicación.
Se habla
además de que “con un mercado turístico en crecimiento, junto con el aumento de
las temperaturas, la demanda de energía es mayor que nunca. Para satisfacer las
demandas de este mercado en crecimiento, el Fondo de Energía Fortuna Virtute se
ha asociado con Pinegy Commercial Group, SRL para construir una planta de
energía de 660 megavatios ubicada en la región sudeste de la República
Dominicana. Una vez finalizado en 2015, esta planta de energía no sólo será
suficiente para las necesidades actuales del país, pero albergará energía
adicional para las empresas a crecer y las nuevas empresas que surjan
existente”. (Ver enlace)
http://www.energy.vffunds.com/power_generation.html.
Como se
desprende de esa información, al parecer, las autoridades dominicanas han
debido aclarar, no solo por qué han
realizado de manera oculta los referidos acuerdos, sino también, quién o
quiénes registran el nombre de esta empresa, la actividad a la que se dedica,
igual que, según muestra el enlace, quién es la empresa socia de Grand
Cayman, sin dejar de mencionar las
implicaciones que podría tener para el país una carta de crédito revolvente.
La
publicación deja claro además que los trabajos de instalación debieron
finalizar en 2015, y que se sepa, esta
planta de energía que se suponen, no sólo será suficiente para las necesidades
actuales del país, sino que albergaría energía adicional para otras empresas,
no ha iniciado sus operaciones.
Como puede
verse, la iniciativa del presidente Danilo Medina de aprobar, grado a grado, de
manera oculta, a través del poder otorgado a Rubén Bichara y, al margen de un
pacto que convoca a diferentes sectores, encabezado por Monseñor Agripino Núñez
Collado, no solo podría constituir una especie de burla, sino que, en términos
de solución, arroja más sombras que luces en el calamitoso sistema eléctrico
dominicano.
Para mayores
detalles consultar documento en el siguiente enlace: http://z101digital.com/app/documentos/instalacion-planta-carbon.pdf
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